PARTE 1: Conocimientos teóricos

Reorientar el objetivo principal de la educación hacia el desarrollo de la personalidad del niño significa cambiar la naturaleza de la educación: la educación tiene que pasar de ser una educación individual a ser un desarrollo cultural, la imagen del mundo y la formación de los seres humanos en él (Cahn, 2009). En particular, la cultura es un determinado vínculo que relaciona los rasgos sociales y genéticos de la personalidad y hace que una persona sea miembro de una sociedad civilizada. Por lo tanto, la educación se entiende como un fenómeno cultural que es el proceso definido como un camino hacia uno mismo y una persona percibe su propósito de vida.

El arte, como la más antigua autoexpresión creativa, emocional, de sentimientos y nociones del ser humano, significa revelar la realidad interior y exterior del ser humano, concebible e inconcebible. En este sentido, el arte se convierte en un espacio muy apreciado para implementar los objetivos de la psicoterapia. Aunque los objetivos terapéuticos no son extraños, existen muchos ejemplos en los que la arteterapia se aplica más como ayuda de armonización psíquica o como solución de conflictos sociales en la educación humana o con otros fines (Dapkute, 2003, p.8).